*Artículo escrito por EzzingSolar
Hace no muchos años la venta de paneles fotovoltaicos de autoconsumo era un proceso lento, pero con mucho margen de beneficio. Hoy en día el margen no es tan grande, lo que hace necesario un proceso que permita vender más rápido con el mínimo coste. ¿Cómo se consigue esto? Con la digitalización.
En líneas generales, la digitalización es la única forma de que el proceso de venta fotovoltaico se haga de manera sencilla, rápida y eficaz, con el mínimo coste y el mayor rendimiento.
Literalmente, la digitalización ha permitido hacer ofertas en unos 25 minutos, lo que supone un gran ahorro de tiempo si lo comparamos con los casi 2 días que se tardaba antes. Y es que, literalmente, hemos pasado de hacer las visitas con metro y escalera a poder calcular toda la instalación, lista de materiales, sombras, modelo en 3D, etc fácilmente desde la oficina. Esto hace posible llegar a un mayor número de clientes, haciendo que el negocio sea escalable. Y no solo llegar, sino además hacerlo rápido. Y ahí es donde está la clave.
En vista de la situación actual, ya son muchas (y cada vez más) las empresas que se lanzan a vender fotovoltaica de autoconsumo. Si es este tu caso, te vamos a explicar más en profundidad en este artículo cómo y por qué la digitalización es una condición imprescindible para agilizar el proceso de venta fotovoltaico.
¿Qué es la digitalización fotovoltaica?
A grandes rasgos, la digitalización consiste en utilizar la tecnología tanto para los procesos como para la gestión de los datos, con el fin de hacer que ambos sean más eficientes y rápidos. Dicho de otra manera, la digitalización en el proceso de venta fotovoltaico es esencial para reducir costes y aumentar el rendimiento.
¿En qué partes del proceso podemos aplicarla?
Lo ideal es digitalizar cada una de las partes de la cadena de valor fotovoltaica, especialmente en la adquisición de clientes y en el diseño de instalaciones. Y es que una de las principales maneras en las que reducir costes, tiempo y aumentar la eficiencia es con el uso de imágenes satelitales y un software de diseño en remoto, entre otras cosas.
Esto nos va a permitir ser más ágiles, porque si podemos acceder al tejado del cliente en remoto, nos ahorraremos varias visitas, con la consiguiente reducción en los costes y en el tiempo.
Por otro lado, si el cliente final puede directamente hacer una simulación desde su casa para saber cuánto le costaría instalar los paneles en su tejado, ya partimos de la situación de que es un cliente informado y que si sigue en el proceso de venta es porque está realmente interesado. Eso, una vez más, nos ahorra tiempo y dinero.
Y esto es solo si hablamos del estudio y diseño de instalación. Pero es que la digitalización, tal y como explicábamos antes, se puede llevar a todas las partes de la cadena de valor fotovoltaica. Desde el estudio y diseño, a la instalación, la monitorización y el mantenimiento. La digitalización también nos permite unir a tres agentes esenciales en este proceso y mantener una comunicación fluida entre todos: proveedores, instaladores y clientes finales.
Por ejemplo, en EzzingSolar, contamos con una aplicación de instaladores y otra de monitorización, para conocer el proceso de la instalación en vivo y para saber el estado de esta una vez realizada y durante el tiempo que dure la relación con el cliente (mínimo 25 años).
¿Cuándo dar el salto?
Si nos lo preguntas, el mejor momento fue ayer y el segundo mejor, ahora. El interés por la energía solar fotovoltaica de autoconsumo está en constante crecimiento y las predicciones futuras son realmente favorables.
De hecho, según datos de la Unión Española de Fotovoltaica (UNEF), el autoconsumo fotovoltaico en España creció en 2021 más del 100% respecto al año anterior. Y esta tendencia sigue en alza, porque en el primer trimestre de este año la instalación de paneles de autoconsumo ha aumentado en un 29%.
Hay que tener en cuenta que crecimiento no se da solo desde el punto de vista del cliente final, sino que las empresas también se están sumando a vender fotovoltaica. Y en todo este escenario, la digitalización del proceso de venta se torna como imprescindible porque, independientemente del volumen de ofertas que generes al día, te va a ayudar a hacerlo más rápido y a crecer de manera exponencial con el mismo esfuerzo.